Lic. Alberto Fumero
La Defensoría del Perú es un órgano constitucional autónomo creado por la Constitución de 1993. Tiene sede en la ciudad de Lima, capital de la República y tiene representación en todo el territorio peruano.
La Defensoría del Pueblo es un órgano constitucional autónomo creado por la Constitución de 1993. Su misión es proteger los derechos constitucionales y fundamentales de la persona y de la comunidad; supervisar el cumplimiento de los deberes de la administración del Estado y la prestación de los servicios públicos a la población.
El Defensor del Pueblo es el titular de la Defensoría nacional. Representa y dirige la institución. Es elegido por el Congreso de la República por un período de cinco años. Goza de total independencia para el cumplimiento de las funciones que la Constitución le confiere. Se rige por la Constitución y su Ley Orgánica.
El Defensor del Pueblo, Busca solución a problemas concretos antes de acusar a alguien. En consecuencia, no dicta sentencias, ni ordena detenciones. Su poder descansa en la persuasión, en las propuestas de modificación de conducta que formule en sus recomendaciones, en el desarrollo de estrategias de protección preventiva, en la mediación que asume para encontrar soluciones y en su capacidad de denuncia pública en casos extremos.
Corresponde a la Defensoría del Pueblo defender los derechos constitucionales y fundamentales de la persona y de la comunidad; y supervisar el cumplimiento de los deberes de la administración estatal y la prestación de los servicios públicos a la ciudadanía.
El Defensor del Pueblo presenta un informe al Congreso una vez al año, y cada vez que éste lo solicita. Tiene iniciativa en la formulación de las leyes. Puede proponer las medidas que faciliten el mejor cumplimiento de sus funciones.
El proyecto de presupuesto de la Defensoría del Pueblo es presentado ante el Poder Ejecutivo y sustentado por un titular en esa instancia y en el Congreso.
En esencia, esta institución en el Perú contribuye al pleno respeto de los derechos fundamentales por parte de las entidades del sector público y empresas presentadoras de los servicios públicos, también aporta a la consolidación de una sociedad inclusiva, equitativa y sostenible, se responsabiliza por defender y promover los derechos de las personas y la comunidad. Supervisa además la actuación del estado y la prestación de los servicios públicos y es útil para la mejora de la política y la gestión pública.
Estrategia
La Defensoría del Pueblo más cerca de la gente fue concebida como una forma proactiva de llegar a la población para brindarle información sobre la existencia de una institución que defiende sus derechos fundamentales.
Sus líneas de acción están basadas en metodologías que toman en cuenta diferentes estilos de enseñanza y aprendizaje, con enfoques de género, interculturalidad, derechos humanos y constructivos.
También se crean talleres para la capacitación d derechos ciudadanos para iniciar procesos de reflexión y análisis sobre situaciones de vulneración de derechos, mediante el conocimiento de sus derechos fundamentales. Se realizan, principalmente, en zonas pobres y alejadas del centro de las ciudades y convocan la participación de la población.
Igualmente se promueven ferias informativas en las que se comparte y transmiten contenido educativo respecto a los derechos y deberes ciudadanos, además de carpas informativas que se desarrollan en zonas alejadas.
Se protegen fundamentalmente:
Niños, niñas o adolescentes
Mujeres
Personas con discapacidad
Pueblos indígenas
Personas afectadas por la violencia
Personas privadas de libertad
Personas que viven con VIH/Sida
Pensionistas
Migrantes
En situaciones de:
Vida, integridad y libertad personal
Salud
Educación
Servicios públicos y transporte
Municipalidades
Descentralización
Medio ambiente
Conflictos sociales
Seguridad ciudadana
Discriminación
Acceso a la justicia
Prevención de la corrupción
Transparencia y acceso a la información pública
Identidad
En conclusión, el trabajo de la defensoría del pueblo en el Perú es digno de reconocimiento por su entrega y compromiso permanente con el ciudadano respecto a los poderes públicos, siendo destacada su labor por los organismos internacionales en la materia.
El prestigio público que se ha ganado esta institución ante la ciudadanía es el arma fundamental para el logro de esos resultados.